Al comprar una nueva casa o tras la instalación de un nuevo suelo de mosaico hidráulico es indispensable limpiar bien las superficies y eliminar todos los restos de cemento, mortero y suciedad de la colocación.
Por desgracia esta operación a menudo no se realiza o se realiza con productos no adecuados, por lo que con el tiempo pueden manifestarse distintos problemas en el suelo.
El mosaico hidráulico por su composición cementosa es sensibles a los detergentes ácidos. Por este motivo es importante, durante la colocación y el rejuntado del material, retirar y limpiar cuidadosamente todos los restos cementosos de las juntas.
Para eliminar la suciedad provocada por la colocación en mosaico hidráulico se aconseja utiliizar el detergente desengrasante PS87 diluido una parte de producto en hasta 5 partes de agua, según el nivel de suciedad. Dejar actuar durante unos 2-3 minutos, frotar con cepillo o estropajo, retirar los residuos (ideal un aspirador de líquidos) y aclarar con abundante agua al final.